Ben Affleck ha establecido una nueva regla de citas para sí mismo en medio de su divorcio en curso con Jennifer López.
La estrella de Good Will Hunting ha hablado abiertamente de sus problemas con el alcoholismo y se está asegurando de que la próxima persona con la que salga pueda identificarse con él a un nivel más profundo. Affleck parece tomarse en serio su compromiso de mantener la sobriedad, lo suficiente como para establecer un límite estricto para cualquier relación futura, según parece.
Una fuente que habló con Life & Style reveló que “Ben está buscando a alguien que esté en recuperación o al menos alguien que entienda el programa de Alcohólicos Anónimos”.
López, de 55 años, solicitó el divorcio de Affleck, de 52, el 20 de agosto, que coincidió también con el segundo aniversario de bodas de la pareja. Las estrellas de Gigli estaban separadas desde el 26 de abril.
Ben ha luchado contra el alcoholismo durante décadas e ingresó en un centro de rehabilitación por primera vez en 2001. Siempre ha sido abierto sobre su experiencia con la adicción.
Sin embargo, sus problemas con el alcohol parecieron ser una fuente de conflicto en sus relaciones pasadas. Un año después de su segunda estadía en rehabilitación en 2017, su entonces esposa Jennifer Gardner organizó una intervención y llevó al protagonista de Gone Girl a un centro para abordar el problema de frente.
La fuente continuó diciendo que “él aprendió por las malas que si quiere que una relación dure y sea saludable, necesita rodearse de personas con ideas afines, y eso incluye a su futura pareja”.
Affleck recayó después de un año de sobriedad en 2019 y se ha mantenido sobrio desde entonces, asistiendo a las reuniones del programa de 12 pasos de Alcohólicos Anónimos. También atribuye su sobriedad a la paternidad y a su hija Violet, de 18 años.
El hecho de que López sea dueño de una empresa de cócteles enlatados, Delola, había sido un punto delicado en la relación de la pareja. Affleck pudo haber sentido que el hecho de que su esposa promocionara una bebida alcohólica no se alineaba con sus valores como alguien que lucha contra el alcoholismo y está comprometido a mantenerse sobrio.
Según la fuente, “quiere a alguien que respalde los límites que ha establecido”.
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